jueves, 19 de junio de 2008

¿Una secta más?

¿Y si el judaísmo que hoy conocemos era hace 2000 años una secta más? El pueblo judío se autodenomina y es reconocido por las demás naciones como "El pueblo elegido". Quitando de este término toda carga peyorativa o sin ser chauvinistas, el pueblo judío en la actualidad se considera legítimo descendiente del "judaísmo bíblico". Antes de empezar a analizar esta cuestión quisiera dejar en claro que personalmente sostengo la legitimidad de nuestro pueblo en ser los "verdaderos" descendientes del antiguo pueblo de Israel. Pero esto no me impide tratar de analizar que fue lo que ocurrió hace unos dos mil años atrás y poder tal vez, deducir que lo que hoy conocemos como judaísmo era tan solo una secta más dentro de la eclosión que ocurrió por los primeros decenios de nuestra era.

Comienzo planteando una premisa. El judaísmo rabinico (Al cual hoy todo judío pertenece) logró que el mundo lo reconozca como los "verdaderos" descendientes de Abraham, Moisés y el Rey David. Ahora bien empecemos a entender un poco más estos términos que usamos frecuentemente sin saber verdaderamente desde cuando se emplean ni su real significado. Comúnmente usamos como sinónimo de judío las expresiones hebreos o israelitas. Si bien para tener una legitimidad histórica como descendientes de los patriarcas o del reino de Israel debemos recurrir a estas expresiones hay que entender que sinónimos no son. Se desconoce de donde viene precisamente el termino hebreo, algunos aducen que es la tribu "habiru" o del verbo hebreo "Ivri" que significa “quien pasa”. Pero en definitiva este término solo se utiliza para designar a los patriarcas y a los primeros líderes del proto-monoteísmo. Por otro lado el término israelitas se utiliza desde los descendientes de Iaacov (que se convierte en Israel). Este termino le da legitimad a los "Bnei Israel" a ser quienes continúan el legado de los primeros patriarcas. Excluyendo así a Esav o Ishmael; y sus respectivos descendientes. Finalmente el termino judío, en hebreo Iehudi, comienza a ser utilizado una vez que el reino del norte, Israel, es destruido y solo queda el reino de Iehuda (la tribu mayoritaria, también estaba la tribu de Benjamín). Los términos que nos autoproclamamos incluyen y excluyen, legitiman y marginan. En este sentido ya podemos ver como ya hace mas de 3000 años se utilizaban estos términos para distinguirse del resto; para así buscar legitimación. Es curioso como en el Koran (Texto sagrado del mundo musulmán) el verdadero heredero del primer patriarca, Abraham, es Ishmael (de aquí el termino ismaelitas).

Decenas de pequeñas sectas buscaron ser en los periodos posteriores a la destrucción del primer templo de jerusalem, en el 586 a.e.c, los continuadores del monoteísmo. Los samaritanos son un ejemplo, pero claramente en nuestras escrituras son deslegitimados. Pero ahora si vayamos al punto emblemático en cuestión. El siglo anterior y posterior a la destrucción del segundo templo de jerusalem son momentos de intensa disputa entre sectas y corrientes de descendientes del reino de Iehuda. Ciertas disputas son en torno al poder pero principalmente son de carácter "religioso"; muchas corrientes dentro de la tierra de Israel buscaban ser los verdaderos intérpretes de las enseñanzas de los profetas y de las escrituras sagradas (Canonizadas, los cinco libros de moisés, en el año 440 a.e.c).

Vayamos pues a repasar algunas de las corrientes mas conocidas. Por un lado se encontraban los Sdukim (Continuadores de un tal Sadok, sumo sacerdote) o en castellano, Saduceos. Este grupo era compuesto por parte de la aristocracia local y principalmente por los sacerdotes, cohanim, del Beit Hamikdash. Argüían que Dios le había conferido a ellos el poder de continuidad de las profetas y de sus escrituras por ser ellos los responsables del culto. Otra secta que eran conocidos como los Isim, esenios, era una secta de ascetas que se marginaron del klal Israel para recluirse en los desiertos cercnos al mar muerto. Decían que el pueblo había sido corrompido por el poder. Pero en esos años un grupo comienza a tomar forma y poder. Los prushim, Fariseos, un grupo de "intelectuales y liberales" que concebía que los sacerdotes solo tenían que hacer sacrificios pero eran ellos los legítimos descendientes de Ezra, el escriba, y de los profetas. Entendían que ellos tenían los conocimientos necesarios para interpretar las escrituras.
Hoy en día al estudiar el periodo histórico del pueblo judío de esos años se denominan principalmente a estas tres corrientes como quienes conformaban el crisol de pensamientos del pueblo judío. Pero, a mi entender, le estamos fallando a la historia. Nos falta incluir a aquellos descendientes de unos fariseos, de Jesús y de pablo. En un primer momento ellos buscaron la legitimidad dentro del mundo "judio" para catalogarse como los verdaderos intérpretes de la voluntad Divina y consecuentemente del pueblo judío. Jesús, o mejor dicho los nuevos evangelios, para situarse como Mesías hace un linaje que lo une con el mismísimo Rey David quien en la cultura hebrea seria de su casa de quien descienda el Mesías.

Entonces. Para ir concluyendo me gustaría citar a una canta-autor argentina "Si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia". Hoy, nosotros judíos, somos hijos de los fariseos y del judaísmo rabinico. El judaísmo rabinico fue el vencedor de esta historia. Los Saduceos con la destrucción del tiempo se desvanecieron. El imperio Romano destruyo a las tribus ascetas del desierto de Israel, entre ellos los esenios. Y finalmente quienes en un primer momento se denominaron judeo-cristianos, rompieron allá por el siglo V la búsqueda por buscar legitimad histórica con los patriarcas y los reyes de Israel. A lo largo de los siglos han surgido grupos que también han buscado ser los verdaderos intérpretes de las sagradas escrituras, entre ellos los Karaitas. Triunfaron pero luego sucumbieron. Hoy el único judaísmo que queda es el que comenzó allí con los Fariseos y continúo con los rabinos. El triunfo del farisaísmo es cuestión de otro análisis mas complejo que espero poder compartir en unas semanas.

Ahora si, finalizando, el judaísmo nunca fue único como algunos tratan de argüir. Ahora bien, nos encontramos en años donde dentro del seno de nuestro pueblo se plantean intensas discusiones sobre que movimiento religioso es el “verdadero” continuador de 2000 mil años de enseñazas rabínicas. ¿Cuál es el movimiento que sigue un desarrollo histórico de nuestro pueblo? La pregunta es ¿Habrá algún ganador? ¿Qué pasaría con los perdedores? O mejor dicho ¿Necesariamente aquí debe haber un ganador? O estamos en una era donde podemos asumir nuestras diferencias y lo que alguna vez se usó como un termino que excluía hoy puede ser utilizado para incluir. ¿Hoy ser judío excluye o incluye?

1 comentario:

GabrielW dijo...

Es interesante pensar que somos descendientes del sector del Judaísmo que sobrevivió al Imperio Romano... ¿a cuál de los actuales grupos seguirán nuestros descendientes??? o ¿¿que hubiese pasado si Yonatan ben Zakai no hubiese logrado crear su yeshiva en Yavne??

ah, y no olvidemos q hace 1000 años los judíos Karaítas eran el 10% de nuestro pueblo!! (hoy día viven sólo unos 50.000 según http://es.wikipedia.org/wiki/Caraísmo )